¿Te has preguntado alguna vez cómo tu forma de pensar influye en quienes te rodean? Cambiar ese enfoque podría mejorar tanto tus vínculos como tu calidad emocional typical.
Pensar en lo que ya tenemos, en lo que hemos conseguido. Algunas personas son infelices porque se centran demasiado en lo que no tienen.
“Hablamos de esquemas que comienzan a construirse en la infancia, a través de nuestra historia, de las experiencias vitales, de lo que vamos viviendo, los roles que ocupamos, las posiciones familiares en las que nos ubicaron y te ubicaste.
Podemos correr, levantar pesas, hacernos unos abdominales… Con el cuerpo en movimiento el pensamiento pierde importancia.
El efecto de la profecía autocumplida es poderoso. Si te dices a ti mismo que vas a enfermar, estás aumentando las probabilidades de que lo hagas.
Los pensamientos negativos no son más que eso: construcciones mentales aleatorias desagradables, agitadoras y productoras de ansiedad, normalmente basadas en remordimientos del pasado o temores sobre el futuro.
El pensamiento negativo se origina por diversas razones. Comprender estas causas es esencial para get more info abordar y transformar estos patrones. A continuación, se presentan dos categorías principales que contribuyen a este tipo de pensamiento.
Las terapias cognitivas conductuales y las ACT (de aceptación y compromiso) pueden ser una estrategia para trabajar con los pensamientos negativos. Especialmente para entender que no son la realidad sino una lectura que se hace de ella. La tarea será entonces, empezar a ponerlos en duda y cuestionar la veracidad de esas afirmaciones.
No caen en la cuenta de que en más de una ocasión el éxito viene despues de multitud de fracasos y que por eso nunca nos debemos rendir.
Es difícil evitar que esos pensamientos vengan a nuestra mente, pero si los dejamos partir sin pensar demasiado en ellos no les dejaremos que nos provoquen malestar alguno.
SOMOS capaces de hacer lo que nos propongamos. Son sólo los pensamientos negativos los que nos impiden conseguirlo.
Nuevo pensamiento: La buena salud es mi derecho de nacimiento y soy inmune a las enfermedades. Bendigo mi cuerpo a diario y lo cuido bien.
Practica la autocompasión y recuerda que todos cometemos fallos en ciertas ocasiones. Trabaja en cultivar una perspectiva más equilibrada y compasiva hacia ti mismo.
Nuevo pensamiento: Dejo ir toda resistencia a la salud perfecta. Me siento cada vez más enérgico y cómodo por dentro y por fuera